Por Rocío Ojeda

En un clima de mucha emoción, 116 familias villamercedinas recibieron la llave de su casa propia, en un acto que encabezó el gobernador Claudio Poggi en el estadio Arenas del parque La Pedrera. La espera fue de 14 años porque se inscribieron en el 2011. Pero el gobierno anterior no les cumplió, nunca construyó los hogares por los cuales habían pagado hasta 72 cuotas. El sueño finalmente se concretó y los adjudicatarios comenzaron con la mudanza ese mismo día.

El cielo cubierto de nubes que amenazó toda la mañana con una posible tormenta, se fue despejando cerca del mediodía cuando los adjudicatarios entraron a sus casas.

La alegría inundó las calles del nuevo barrio, que es colindante al barrio Unión. Niños jugando y familias sentadas en la vereda con sus reposeras contemplando el nuevo hogar, que, si bien la mayoría estaba sin muebles, la llenaron con la ilusión de otro comienzo.

Matías Rocha contó que vive este momento con un sentimiento agridulce ya que, en la espera, perdió a su esposa con quien había proyectado el sueño de la casa propia.

Matías Rocha. (Foto Nahuel Sanchez)

“Esta casa la esperábamos en el 2011, en ese entonces yo me anoté con mi esposa que falleció en el 2021 por COVID, así que era un anhelo, un sueño que teníamos. En estos 14 años, como decía el gobernador, pasaron muchísimas cosas. Una de esas es la pérdida de mi esposa. Hoy estoy contento, no estoy feliz, es una mezcla de sensaciones. Pero bueno, acá estoy con mis amigos y con mi mamá, que me vinieron a acompañar”, sostuvo en diálogo con El Chorrillero.

Aseguró que ahora le queda proyectar una nueva vida en su nueva casa “que siempre trae sueños y nuevos comienzos”, señaló.

“Esta casa la esperábamos en el 2011, en ese entonces yo me anoté con mi esposa que falleció en el 2021 por COVID, así que bueno, era un anhelo, un sueño que teníamos. En estos 14 años, como decía el gobernador, pasaron muchísimas cosas. Una de esas es la pérdida de mi esposa. Hoy estoy contento, no estoy feliz, es una mezcla de sensaciones. Pero bueno, acá estoy con mis amigos y con mi mamá, que me vinieron a acompañar”, reflexionó.

Aseguró que ahora le queda proyectar una nueva vida en su nueva casa “que siempre trae sueños y nuevos comienzos”, señaló.

También destacó las palabras de Poggi en el acto cuando dijo que cumplió con la palabra “eso yo creo que es lo más importante en estos tiempos donde necesitamos gestos de la clase política, y que un gobernador cumpla con su palabra, me parece excelente”, aseveró.

“Estoy muy agradecido con Dios que en su providencia nos regala una casa, también con el gobernador y ojalá que vengan miles de casas más”, dijo.

LEÉ TAMBIÉN:

Poggi cumplió su compromiso y le entregó las viviendas a 116 familias de Villa Mercedes que esperaban hace 14 años

Otra de las beneficiarias fue Patricia Monsalvo, que, con una gran sonrisa en su rostro, contó que vivirá junto a sus tres hijos y nuera. “Hoy mismo nos venimos para acá, ya estamos acomodando y limpiando, viene el flete y ya nos quedamos”, reveló.

Patricia Monsalvo junto a sus hijos. (Foto Nahuel Sanchez)

Además de la felicidad por su casa, destacó que tendrá un gran alivio económico ya que, hasta ayer que finalizó octubre, estuvo alquilando. “Gracias a Dios ya tenemos la casita. Hablo y se me llenan los ojos de lágrimas, es una emoción muy grande”, aseguró.

En el 2011, cuando Cristina García se anotó en el plan de vivienda, comenzó el anhelo de la casa propia. “Estamos felices, después de tantos años de espera, al fin ya en nuestra casa”, expresó y contó que vivirá junto a su marido y sus tres hijos de 15, 11 y 8 años.

Admitió que al principio habían perdido las esperanzas, pero que el año pasado cuando el gobernador les dijo que se las iban a entregar, volvieron a confiar. “Nosotros teníamos 72 cuotas pagas, pero cuando se cortó, bueno, no pudimos seguir pagando y ahí sí habíamos perdido un poco la esperanza”, dijo.

Cristina García y su hija ya empezaron a acomodar su casa. (Foto Nahuel Sanchez)

Reveló que se mudarán durante el fin de semana y que será un gran alivio porque antes alquilaban.

Luego de recibir su llave, a María González ya la estaba esperando el flete para llevar todos sus muebles a su nueva casa y mudarse hoy mismo junto a su pareja Roberto, sus dos perros, dos gatos y una cata.

María y Roberto, en la casa propia. (Foto Nahuel Sanchez)

“Hoy dormimos acá, entre cajas, entre el barro, no importa, pero ya estoy en mi casa”, contó.

“Estoy feliz, llegó el día que tanto esperé y después de tantos años, el señor gobernador, Claudio, me cumplió la promesa de que me iba a entregar la casita un día”, expuso con alegría.

Otra de las nuevas propietarias es Lumila Carranza que vivirá junto a su pareja y sus dos hijos de 14 y 5 años.

Dulce hogar para Ludmila. (Foto Nahuel Sanchez)

“Sentimos una alegría inmensa que tenemos la casa, es un sueño cumplido para toda la familia”, dijo y agregó que su hijo más grande asiste a una escuela cerca del barrio y que ahora le quedará a solo cinco cuadras y que eso le da mucho alivio.

El nuevo barrio ya tiene vida. (Foto Nahuel Sanchez)

El nuevo barrio ya tiene vida. (Foto Nahuel Sanchez)

El nuevo barrio ya tiene vida. (Foto Nahuel Sanchez)

Fotos: Nahuel Sanchez